Las mujeres llevan décadas luchando por posicionarse de una manera igualada a los hombres. Mujeres que han querido trabajar, que han querido tomar decisiones o simplemente que han querido vivir independientes, han tenido que luchar y pelear hasta la saciedad. Ejemplos claro de ello serían mujeres como Rosa Parks, Santa Teresa de Calcuta o Ada Lovelace.

El hecho de que las mujeres estén en la misma posición que el hombre en la actualidad ha sido tema de relevancia en los últimos años, ya que esto está ligado inevitablemente a la violencia de género y a la protección a la mujer. El miedo a la inferioridad ha sido resaltado en los últimos años de una manera gratificante, sobretodo en los países occidentales y en los medios de comunicación de estos. Utilizando a los medios masivos como la televisión, el cine o la publicidad para la ayuda y la reivindicación de la mujer y sus derechos.

Netflix, la plataforma estadounidense creada para el entretenimiento y el visionado de multimedia está funcionando y cumple su cometido como plataforma audiovisual. Miles de usuarios consumen  y son participes de la original manera de hacer comercio en series, peliculas y documentales. Pero aparte de cumplir este cometido, Netflix está extrapolando un mensaje que inconscientemente está llegando a todos los usuarios: La mujer luchadora en los distintos ámbitos de la vida.

Este reflejo de la mujer luchadora podemos observarlo en series tan conocidas como Orange is the new black, serie en la que el poder femenino resalta ante los desafíos de una gran prisión.The Crown, otra de las series que cuenta la valentía y la astucia de Isabel II en la  sociedad aristócrata.  Unbreakble, la comedia de tres temporadas y una renovación para la cuarta que hace crítica a temas tan relevantes como las redes sociales. The Sinner, la serie de la intriga, en la que su protagonista deja todo el tiempo al usuario con la miel en los labios.

Es Nextflix junto a HBO y otras plataforas como Youtube, el tipo de canal codificador de enigmas de este tipo. Tienen el poder de dejar ver mucho más que una serie o película. Así lo afirma Carmen Sánchez Rodriguez, estudiante de Comunicación Audiovisual, de tercer año. “La mejor forma que tiene la mujer de demostrar que es igual a un hombre es enseñando al mundo todo lo que ha hecho por estar donde está”. Considera que son este tipo de grandes plataformas las que lo son todo en la sociedad de hoy en día y en su manera de afectar al individuo que las consume.

Carmen, además de estudiar, en su aprendizaje intenta centrarse siempre en temas relacionados con la mujer y su evolución a lo largo de la historia de la humanidad. En uno de sus proyectos analiza detenidamente a la plataforma Netflix, y muchas de las pelÍculas y series que rozan el tema por algún lado. Los ejemplos anteriores, y también series como Thirteen Reasons Why o Sin senos sí hay paraíso, han sido carne de cañón para su análisis y su estudio profundo del tema. “En Colombia, la mujer sigue siendo inferior, usada, maltratada y solamente valorada por su físico. Y no solo en Colombia, sino en muchos países con culturas en las que la mujer es una figura minúscula.” (Por la serie de Sin senos si hay paraíso).

En definitiva, aspectos como éste son los que dan de que hablar en la actualidad. Desde los más jóvenes a los más mayores son conscientes de que la mujer está ganando el terreno que algún día desde los comienzos no tuvo. Está claro que en la actualidad no sería posible o no sería tan fácil si no se contara con estos medios masivos, que cuando están bien usados, pueden hacer y conseguir realmente maravillas.